Empieza esta cuarta entrada al blog, con el recorrido por la
Catedral de Santa María de Vitoria. Lo bueno se hace esperar, y no es que me
haya hecho de rogar, sino que creía que una introducción previa haría más
atractivo el blog.
Aviso a navegantes, voy a intentar ilustrar casi todos los
datos que escriba, para que los que no habéis tenido la posibilidad de verla,
la imaginéis de una forma más directa. Pero
aviso, que la realización de fotografías por el exterior se hace
verdaderamente complicada. Además de que sigue en obras. Al tener las calles
tan intrínsecas, los edificios quedan unos muy unidos a otros, haciendo que la
contemplación quede reducida a esto:
Por eso, lamentablemente las fotos que voy a utilizar para
enseñaros el exterior, no van a ser de cosecha propia, porque sino serían todas
como la anterior.
Este edificio, que ha sido mi fuente de
inspiración para la creación del blog, está construido sobre los restos de una
ermita románica. Esta era una costumbre habitual en la Edad Media, ya que de
esta forma conseguían no tener que volver a cimentar la estructura del edificio
en construcción.
La imagen corresponde al proyectode iglesia-fortaleza de Alfonso VIII
No voy a hacer una entrada específica para este edificio más
primitivo, pero sí que hay que avisar de que en los muros de la actual catedral
se conservan 20 metros ,
en algunos casos, de lo que sería la fachada verdadera de la ermita-fortaleza.
En la imagen superior podemos ver, cómo se reutilizó el
ábside para la nueva edificación, y se hizo otra que supliese el culto mientras
se construía la definitiva.
Con Alfonso X (1252-1284) el templo toma el aspecto gótico
en dos fases. La primera es en la que se procedió a forrar el interior con
sillería, y se abrieron las ventanas y construyeron las bóvedas pertinentes.
Unos años más tarde, se retomó el proyecto de nuevo, al que pertenecen los
sillares con marcas de canteros. Además de cerrar el templo, se construye en
este momento la portada de Santa Ana, la Capilla de Santiago y el triforio de
la catedral. En esta segunda fase en cuando se erigen las bóvedas altas con
madera. No debemos de perder este dato a lo largo de la descripción, porque en
este detalle es donde residen los problemas de nuestro edificio.
Unos años más tarde, 1496 se otorga la bula de traslación de
la Colegiata de Armentia a Vitoria (se acabará completando en el 1498).
Probablemente este pequeño cambio, pero muy sustancial, hizo que la Catedral de
Santa María tuviera que “embellecerse”. Había pasado de ser un edificio
religioso situado en la colina de Vitoria, a ser Colegiata. Con mucho esfuerzo
y mano de obra, se acaba de construir aquello que estaba sin finalizar, y lo
más importante, en los siglos XV y XVI se sustituyen las bóvedas de madera, por
otras mucho más pesadas de piedra.
“La fama es peligrosa, su peso es ligero al principio, pero se hace
cada vez más pesado el soportarlo y mucho más difícil aún de descargar”
Con esta frase de Hesíodo, os dejo que imaginéis libremente
unos días, si el templo pudo soportar el peso o por el contrario acabó cayendo
en ese afán de embellecimiento…
¡Hasta la próxima entrada!
MARTÍNEZ DE MARIGORTA, José, Las dos catedrales de Vitoria, Caja de Ahorros de Vitoria
www.catedraldevitoria.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario